
Insisto
Leo tus labios.
Voy de mi corazón
desaprendiendo tus deseos,
devoro tu sed
me sumerjo en las ondas
que quedan de tu amor.
Deletreo hasta encontrate
en el olor de los mangos maduros
en el color oscuro de tu sangre
y de tu historia.
Insisto en que se desvista
la noche.
Ángela Penagos Londoño