Angelal

Angelal
El amor es una estación de preguntas y la luna lámpara de sombras sobre el cielo.

En mi voz de mujer




domingo, 29 de mayo de 2011

A Diego Alejandro Samacá Garzón "Voltraks" - Comuna 13 de Medellín


CAJA DE CARTÓN

Han cerrado la puerta
del barrio
y en sus ojos
arden pesadillas.

El poeta
desciende
la escalera en sombras
y lo recibe
un espacio estrecho
de agonía.

Guarda en su caja de cartón
las gotas de soledad
y desamparo
junto a su camisa
con olor a humo.

Ha convertido sus relatos
en canciones de rap
para excitar
el mundo de los sordos
vociferando
su vida a la deriva.

Bravo muchacho
sigue adelante
mientras sujetas
mi alma
con alfileres.

miércoles, 18 de mayo de 2011

Va de viaje mi alma - Finalista III concurso Relatos de Viaje-España


De entre 300 relatos que enviaron al III concurso de Relatos de viajeras convocado en Madrid, España, apoyado por el Ministerio de Igualdad, Unión Europea, Trang Word y Sabatica mi escrito fue seleccionad como finalista y será publicado en un libro con otros relatos ganadores.

Quiero compartir mi relato y la felicidad de este premio.

VA DE VIAJE MI ALMA

La vida es un viaje fabulado. Entre con miedo de no saber que hacer con ella. Yo he venido a espiar las culpas de Eva, de las que me hablaron cuando era niña y de las que nunca me pude escapar.

Escogieron para mí el nombre de Ángela convencidos de que mi bautizo me haría permanecer en estado de gracia.

A mis trece años todos los sentidos empezaron a aletear en mi ser como si fuera la llama ardiente de la que hablaba el sacerdote en la misa de las 6:00 de la mañana. Una presencia de culpa me hacia arrodillar recogida de miedo para confesar los signos de este océano de olas despertando en mi cuerpo.

Era el tiempo donde se estructuran las cosas, las formas, tenía que ver con las pasiones, ese paso de un estado a otro, la ebullición que motiva a comenzar de nuevo cada mañana, a tener paciencia y para seguir el viaje.

Recuerdo con claridad cuando me enamore. No sé si lo que sentía estaba ubicado en el corazón o en el hígado Estaba convencida de que había cogido el cielo con las manos y sin muchos razonamientos sobre la personalidad del hombre que me acompañaría, decidí dar el paso hacía los altares.

Me vestí de novia, caminaba con cierta feminidad, el velo era de leche y nata y mi naturaleza biológica estaba lista para entregar el útero eterno a la procreación.

Yo viví la cotidianidad, las luchas para sobrevivir hasta que llegaron los niños y sus juguetes. Los brazos abiertos esperando soltarle el miedo a los pasos nuevos.

Menos mal que los recuerdos todavía caminan sobre la intención de los besos entregados cada mañana, en los cabellos mojados y la borrasca de los desayunos empeñados en la mesa mientras corríamos al transporte que los llevaría al colegio.

Y evoco los juramentos que hice con mi pareja de estar juntos para toda la vida. No sé si a usted le ocurrió, pero a mi se me estrecho el amor de tal manera que un día salio corriendo por la puerta para no regresar.

Entramos en una especie de invernadero y los silencios se levantaban enfermos sin tiempo para la convalecencia, sin medicina para curarlos. Y ellos fueron la cuota para generar un caos y encontrarnos en un cruce de caminos.

He regresado a mi soledad, las ropas de mis hijos cuelgan en otros armarios y flotan las fotografías amarillas en los cajones sin llaves para el olvido.

Menos mal que he vuelto a jugar con trocitos de papel y un lápiz que tizna mis dedos con su punta mientras las palabras visten el desierto de mis días resucito entre poemas.

En mis cuarteles de invierno acudo puntualmente a la salida del sol y entre apretones de manos me doy cuenta que el viaje nunca termina, seguirá orbitando como los astros hasta después de la muerte.

domingo, 8 de mayo de 2011

Metro de Medellín - Compromiso con el arte






En la Estación Itaguí del Metro de Medellín se encuentra la exposición itinerante "Mujeres de la tierra florida" un homenaje a las mujeres poetas y un acto de amor por la ciudad. Llegar después del viaje y encontrar ese entorno mágico nos lleva al asombro y a la dignificación del ser humano.

Tuve la oportunidad de abrir la exposición con un recital no anunciado, diciendo poemas en voz alta para sorprender a los viajeros. Aquel ingenuo acto me permitió descubrir los sentimientos que afloran cuando el arte se encuentra con nosotros. Algunos pasaron de prisa, otros se sonreían, otros se asombraban, pero algunos se detuvieron, cerraron sus ojos y entraron en la travesía de la palabra transfigurada. Una joven abismada ante ese manantial de metáforas, me sorprendió pues sus ojos estaban bañados de lágrimas y me dijo: " He detenido mi afán para darle paz a mi alma".

Gracias al Metro de Medellín porque la poesía nos une y cumple con una de las misiones mas bellas del arte: crear belleza para transformar.

Hice este proyecto en el segundo programa "Medellín, las mujeres y las artes" apoyado por la Secretaría de la Mujer de la Alcaldía de Medellín, con fotografía de Tatiana Pérez, que sabe capturar con lucidez la imagen para entregarla limpia, como las estaciones de la vida.