Es el cerro tutelar del pueblo de San Marcos, era la montaña sagrada de los antiguos Kollana Pinkus. Tiene forma triangular, tiene vida, espíritu. A este lugar venían los índigenas para hacer sus ofrendas y los rituales.Las espectaculares formaciones rocosas que emergen a lo largo de los flancos del Callejón de los Conchucos se presentan con una singular morfología en el caserío de Huallanca, a 10 minutos de la ciudad de San Marcos.
Precisamente es esta característica, morfológica y geográfica la que hace de este bosque de rocas, ideal para el acondicionamiento de un rocódromo para el aprendizaje y práctica de la escalada en roca, que es uno de los deporte de aventura más practicados en el mundo de los deportes al aire libre.
Es un canto a la geografía y al sentimiento, letargo del tiempo, logré escalar y percibí el misterio de este lugar sagrado, el paisaje me conmovió hasta las lágrimas.
Ven conmigo a subirlo. Atrévete. Vale la pena.
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